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Fuente de la imágen: julos
A pesar de que hay bastante evidencia sobre los efectos benéficos del magnesio en la salud del ser humano, este nutriente ha recibido poca atención en el campo de las Enfermedades Crónicas del Riñón.
Esto es sorprendente, dado que el calcio y el fosfato, los cuales interactúan de manera cercana con el magnesio en el cuerpo, son reconocidos como los principales agentes en los desórdenes de los minerales y los huesos cuando hay una enfermedad crónica del riñón.
Sin embargo, un número en aumento de estudios clínicos se están enfocando en la implicación del magnesio para la prognosis de pacientes con enfermedades crónicas del riñón y en las enfermedades del riñón en su etapa final.
En este artículo queremos tratar con la evidencia que está apareciendo, en donde encontramos que el magnesio es un potente inhibidor de la calcificación vascular, y se ha observado que un bajo contenido de magnesio en sangre, son asociados con un riesgo mayor de mortandad por problemas cardiovasculares. Más aún, varios estudios sugieren que el tener bajo magnesio puede agravar la progresión de las enfermedades crónicas del riñón. Vamos a ver la relación entre el magnesio y el avance de las enfermedades crónicas del riñón y los beneficios potenciales de la prognosis en la enfermedad renal.
La deficiencia de magnesio y los factores de riesgo en la enfermedad crónica del riñón.
La deficiencia de magnesio puede ocurrir en pacientes con enfermedad crónica del riñón y en personas sin esta aflicción. Las mayores causas de deficiencia de magnesio sigue de esta manera:
1. Bajo consumo de magnesio (típicamente la dieta occidental tiene baja ingesta de verduras y alto en comida rápida procesada)
2. Problemas de ingestión gastrointestinal (como por ejemplo en los pacientes con enfermedades crónicas del riñón que tienen deficiencia de vitamina D y que usan inhibidores de la bomba de protones.)
3. El aumento de excreción de la orina (por ejemplo la toma de diuréticos o la resistencia a la insulina.)
En las últimas décadas, algunos estudios de cohorte de base poblacional (Estudio de investigación que compara un resultado en particular en grupos de individuos que son similares en muchos aspectos, pero que se diferencian por una cierta característica) indican que un nivel bajo de magnesio está asociado con un aumento en el riesgo de enfermedades cardiovasculares, así como hipertensión y la resistencia a la insulina, riesgos comunes de las enfermedades crónicas del riñón.
Hipertensión:
Una de las principales funciones del magnesio es inhibir la concentración de calcio en las células del músculo liso vascular. Por lo tanto el magnesio potencialmente reduce los niveles de presión alta y contribuye a la vasodilatación.
Un meta-análisis que incluye 22 ensayos mostraron que los suplementos de magnesio reducen la presión sistólica en la sangre casi en 4 mm Hg y la presión diastólica aproximadamente en 2mm HG. 8 Notablemente, se logró un gran éxito en pruebas prescribiendo una dosis mayor de magnesio.
Resistencia a la insulina:
El magnesio es un mineral esencial para el metabolismo de la glucosa mientras sirve como un factor aliado para muchas enzimas clave en el camino de los glicolíticos. El magnesio es también requerido como señalización de la insulina, como la fosforilación del receptor de la insulina llamado tirosina quinasa, por lo tanto, la deficiencia de magnesio nos puede llevar a una resistencia de insulina.
Al contrario, los pacientes que ya tienen diabetes tienen un alto riesgo de sufrir deficiencia de magnesio.
El bajo consumo de magnesio en la dieta está directamente relacionado con el riesgo de diabetes. Un meta-análisis de 13 estudios, mostraron que un aumento del consumo de 100 mg de magnesio por día reduce en 14% el riesgo de contraer la enfermedad. Esta relación es más pronunciada entre las personas con una mayor masa corporal.
El Magnesio y el riesgo de enfermedad cardiovascular
Consistente con la evidencia antes mencionada que nos habla de los efectos protectores del magnesio contra los factores de riesgo ateroscleróticos, varios estudios en la población predominantemente que no sufre de la enfermedad crónica del riñón, encontraron una relación cercana entre el estatus del magnesio en el cuerpo y el riesgo de infarto al miocardio, falla del corazón o un ataque cardiaco.
Un ensayo doble ciego aleatorio en 79 pacientes con fallas cardiacas congestivas graves (clasificación etapa 4, según la asociación del corazón de nueva york), al observar el efecto del magnesio en la prognosis de los pacientes, se puede ver que el ratio de supervivencia mejoró significativamente en pacientes que recibían magnesio (75.5%) comparado con los pacientes que recibieron el placebo (51.6%). El tomar suplementos de magnesio puede ofrecer una mejora de la prognosis en pacientes con falla cardiaca crónica.
Deficiencia de magnesio y progresión de la enfermedad crónica del riñón – Grupo de estudios
Como hay una asociación cercana entre la deficiencia de magnesio y las enfermedades cardiovasculares, y dado que las enfermedades cardiovasculares y las enfermedades crónicas del riñón comparten factores de riesgo y patologías similares, es plausible que tener bajo los niveles de magnesio también contribuye a la progresión de las enfermedades del riñón.
Usando la base de datos del estudio de comunidades del riesgo de aterosclerosis, un gran grupo de estudios de aproximadamente 13,226 participantes. En estos estudios se puede observar una asociación longitudinal entre los niveles de magnesio en sangre y el riesgo de desarrollar una enfermedad crónica del riñón o la enfermedad de los riñones en etapa terminal. Un seguimiento a estos pacientes durante 21 años demostró esta asociación en comparación con pacientes que sí tenían un nivel adecuado de magnesio en sangre.
Resumen clínico
La deficiencia de magnesio es conocido por estar asociado con hipertensión, resistencia a la insulina entre otros factores de riesgo muy comunes que contribuyen a la progresión de la enfermedad crónica al riñón.
La presencia de bajos niveles de magnesio está asociado con un aumento en el riesgo de enfermedades del riñón y la progresión a la enfermedad pero en sus etapas terminales.
El efecto protectivo potencial del magnesio en la enfermedades crónicas del riñón puede estar derivado por su propiedad para contrarrestar la toxicidad del fosfato.
El magnesio y la progresión de las enfermedades crónicas del riñón:
Esta asociación fue asegurada en un estudio grande en la población general que muestra la relación entre los niveles de riesgo en las enfermedades crónicas del riñón. Especialmente en el estudio para la prevención de las enfermedades renales y vasculares en su etapa final, que incluyó 5,113 participantes que no tenían problemas del riñón, encontró una relación directa entre una dieta baja de magnesio y el riesgo de presentar la enfermedad. Demostró que los que tenían bajos niveles de magnesio en sangre sufrieron un deterioro más rápido de las funciones del riñón determinando que una baja presencia de magnesio lleva a enfermedades del riñón; esta progresión es aún más negativa en los pacientes con diabetes mellitus que aquellos que no lo tienen.
El rol del Magnesio en las lesiones inducidas por la alta presencia de fosfato.
La toxicidad del fosfato para el riñón hay que tenerlo en cuenta en adición a los factores de riesgo ya conocidos, hay varios factores no tradicionales que contribuyen a la progresión de las enfermedades crónicas del riñón. En particular, la hiperfosfatemia es directamente dañina para el riñón. En pruebas hechas en animales, una dieta alta en fosfatos agrava las lesiones al riñón, como cuando está presente la fibrosis intersticial que es atenuado por la administración de aglutinantes de fosfato.
Consistente con los estudios en animales, varios estudios, aunque no todos, mostraron una asociación entre la hiperfosfatemia y un aumento de riesgo de la progresión de las enfermedades crónicas del riñón.
Notablemente estos estudios nunca han considerado los niveles de magnesio en sangre en estos análisis. Sin embargo, el mecanismo subyacente por el cual el exceso de fosfato daña al riñón permanece sin descubrirse pero se ha observado que los cristales de fosfatos de calcio daña las células próximas tubulares del riñón al inducir estrés oxidativo.
Esto corresponde con el concepto actual de que la calcificación es causado por partículas de calcio proteína (nanopartículas coloidales formadas por un complejo de calcio fosfato y varias proteínas como la fetuin-A.)
Notablemente las partículas de calcio proteína han sido detectadas en las células tubulares del riñón en pacientes con enfermedad crónica del riñón. Parece, por lo tanto, plausible que los efectos tóxicos del fosfato en el riñón es al menos en parte derivado de estas partículas secundarias de calcio proteína en las células tubulares.
El Magnesio como un inhibidor de las partículas de calcio proteína.
Desde la perspectiva de un desorden mineral en la enfermedad crónica del riñón, un elemento importante del magnesio es que inhibe la cristalización del fosfato de calcio. Esta propiedad química lleva a un efecto inhibitorio en la maduración de las partículas de calcio fosfato.
Clínicamente hablando, hay una correlación positiva entre los niveles de magnesio en la sangre y la supresión de la maduración de las partículas de calcio fosfato. Un reciente estudio aleatorio controlado en pacientes con enfermedades crónicas del riñón, aunque fue una prueba pequeña, arrojó que los pacientes en estado de 3 a 4 de la enfermedad crónica del riñón, el tomar suplementos de magnesio fue útil para aliviar el estrés por calcificación. Estos hallazgos proveen de un conocimiento sobre las observaciones in vitro y en vivo en donde el magnesio suprime la calcificación vascular inducida por el fosfato.
El balance entre magnesio y fosfato y los resultados clínicos en enfermedades crónicas del riñón.
Considerando que el magnesio contrarresta la calcificación vascular fosfato inducida, el magnesio podría atenuar los riesgos asociados a hiperfosfatemia. En un grupo de pacientes en hemodiálisis se pudo encontrar que el riesgo de mortalidad asociado con hiperfosfatemia no aumentó entre aquellas con un mayor nivel de magnesio en la sangre, mientras que el riesgo aumentó entre aquellos con bajos niveles de magnesio en la sangre.
Este resultado sugiere la importancia del balance entre magnesio y fosfato en los resultados cardiovasculares en pacientes en diálisis,
La habilidad del magnesio para aliviar la toxicidad del fosfato, puede también ser valioso en términos de lesiones del riñón inducidas por los fosfatos
Aquí, podemos ver la interacción entre el magnesio en la sangre y los niveles de fosfato al considerar el riesgo de progresión a la enfermedad del riñón en su etapa terminal.
El riesgo de enfermedad de los riñones en etapa terminal tuvo un incremento en pacientes con alto fosfato y bajo magnesio en sangre; comparado con aquellos que tenían alto fosfato y alto magnesio, lo cual sugiere que el magnesio es protector contra el riesgo de progresión de la enfermedad crónica del riñón derivado de la gran presencia de fosfatos en la sangre. Esta noción es respaldada por los experimentos in vitro, que muestra que el magnesio alivia los problemas al riñón derivados por la presencia de fosfatos, por lo tanto el magnesio puede servir como una opción terapéutica para la toxicidad de fosfatos, no solo para el riesgo cardiovascular sino para la progresión de la enfermedad crónica del riñón.
Conclusiones:
En conclusión, un número de estudios experimentales y observacionales han abogado por la importancia del magnesio en las enfermedades crónicas del riñón. El magnesio no solo actúa en los factores de riesgo de arteriosclerosis sino también en los factores de riesgo de la enfermedad crónica del riñón. La práctica clínica actual se enfoca en cómo remover los promotores del estrés de calcificación, como la hiperfosfatemia y la hipercalcemia. Pero como hemos aprendido el magnesio puede servir como una estrategia alternativa para mejorar la prognosis en pacientes de enfermedades crónicas del riñón, aunque hace falta conocer más sobre los efectos benéficos en la progresión de las enfermedades del riñón.
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